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ALIMENTACION PARA PERROS DE TRABAJO
¿QUÉ ES UN PERRO DE TRABAJO?
Lo primero que tenemos que diferencias es el término “raza de trabajo” y “perro de trabajo”.
La FCI (Federación Cinológica Internacional) reconoce un total de 341 raza oficialmente (en este número, no se incluyen las razas nativas en proceso de reconocimiento o recuperación por sus países asociados) mientras que el AKC (American Kennel Club) reconoce muchas menos: 193.Todas las razas caninas fueron seleccionadas o creadas con una función: ayudar al hombre en diversas actividades diarias (incluyendo la compañía, aunque esta no es un “trabajo”), tales como la caza, el pastoreo, la guardia / defensa, el cobro, la detección de enfermedades o crisis emocionales, ser los ojos de los ciegos y los oídos de los sordos…
La mayoría de razas caninas son de trabajo, aunque sus funciones originales hayan sido relegadas a un segundo plano: Border Collies que no pastorean, Yorkshire Terrier que no cazan ratas, Caniches que no cobran en el agua los patos cazados y Dobermanns que no defienden a sus propietarios.
Por otro lado, tenemos el término “perro de trabajo”, un perro de trabajo puede ser o no de raza siempre que cumpla una función de utilidad de las anteriormente mencionadas, principalmente porque tiene una predisposición genética para ello o sus instintos son más primarios (por ejemplo, en el caso del instinto de caza).
¿CÓMO DEBEMOS ALIMENTAR A NUESTRO PERRO DEPORTISTA?
Cuando nuestro perro se dedica en cuerpo y alma a un trabajo o deporte concreto (los deportes con perro tienen más adeptos cada año, como en el caso del agility, el canicross, la obediencia o el mondioring) su propietario (también conocido como “guía”) debe tener claro que la formación, el ejercicio y una correcta nutrición son esenciales para garantizar el rendimiento óptimo del perro de trabajo / deportista.
Para responder a estas necesidades nutricionales, debemos buscar para nuestro perro una fuente de proteínas y grasas de gran calidad (que ayudarán al mantenimiento y desarrollo del músculo así como ofrecen a nuestro perro de una buena fuente de energía), apoyándonos en los carbohidratos, que no deben faltar.
Variada, equilibrada, digerible y nutritiva, así es como debe ser la dieta de un perro de trabajo; si optamos por productos baratos, llenos de subproductos (animales o vegetales) y fórmulas poco cuidadas, nos arriesgaremos a que nuestro perro tenga un rendimiento pobre y, en el peor de los casos, pueda sufrir lesiones de diversa consideración: malas digestiones, gases (lo que, combinado con el ejercicio, puede desencadenar en una torsión de estómago), exceso de materia fecal, alergias, problemas cardíacos o hepático-renales, bajo peso…
LA CORRECTA ALIMENTACIÓN DEL PERRO DE TRABAJO: ALGO QUE TRABAJAR DESDE LA INFANCIA
Pero, la buena alimentación debe comenzar en la infancia de nuestro perro, no cuando nos decidimos a practicar algún tipo de trabajo o deporte con él; al igual que sucede en los niños, si la alimentación de nuestro cachorro es óptima, rica en nutrientes y variada, sus huesos, músculos y articulaciones serán fuertes, lo que proporcionará una mayor resistencia física y un resultado mucho más satisfactorio. Así mismo, si nuestro perro sufre algún percance inesperado durante el trabajo, al poseer un sistema inmunológico fuerte y un gran estado de salud, su recuperación será mucho más rápida.
No debemos limitarnos a cebarlo con cualquier cosa, sino a buscar la dieta que mejor se adapte a sus necesidades y el deporte o función que practica, en su justa medida y apostar por ingredientes de la mejor calidad, aceptando a su vez que esto no será barato, ya que nadie regala nada.
La ternera o el caballo son grandes fuentes de proteínas fáciles de digerir, siendo la segunda una gran fuente de hierro.
PIENSOS DE CALIDAD PARA PERROS DE TRABAJO
En lo que se refiere a piensos de calidad ligados a estos dos tipos de proteína animal, tenemos el Pienso Angus Beef Para Perros Adultos de Reis d’Aranda, un pienso de altísima calidad sin cereales (los cuales, añadiremos como propietarios en la forma que mejor vaya a nuestro perro) que cuenta con un 65% de carne de ternera Angus, sin duda es una de las mejores carnes del mundo debido a sus características, rica en proteínas de alto valor biológico, hierro, fósforo, vitamina B y ácidos grasos insaturados de la familia Omega 6.
Por otro lado, tenemos el Pienso Natural de Caballo para Perros Adultos de Reis d’Aranda, con un 45% de carne de caballo de altísima calidad que lo convierte en una gran fuente de proteínas, vitaminas del complejo: B1-B2-B3-B6 y B12, y minerales esenciales como el zinc, el hierro, el fósforo y el magnesio.
Si en algún momento tenemos dudas acerca de qué alimentación es mejor para nuestro perro de trabajo o deportista, consultaremos siempre a profesionales: veterinarios especializados en nutrición y profesionales del trabajo con perro, siempre en combinación.
LA ACTIVIDAD FÍSICA MODERADA Y ESCALADA ES FUNDAMENTAL
Por último, no debemos olvidar que la actividad física y mental es muy importante en el día a día de los perros, cuando un perro trabaja de una forma u otra, es mucho más feliz que un perro aburrido y frustrado que no ve sus necesidades genéticas o individuales cubiertas, lo que puede desencadenar con rapidez en comportamientos indeseados: perseguir coches, bicicletas o patinetes por la calle, agresividad, automutilación (lo más común suele ser chuparse/morderse las patas o perseguirse el rabo) o comportamientos destructivos en el hogar.
Hay muchas razas y perros maravillosos, pero cuando adquirimos uno (de la forma que sea) tenemos que conocer muy bien las necesidades de esa raza en concreto, y no limitarnos a su popularidad en la sociedad, lo bonito que nos parece o la lástima que nos da, ya que podemos encontrarnos en un problema importante que puede alargarse durante los siguientes diez o quince años (cosa que sucede muchísimo con los border collie, los malinois o el husky siberiano). Si por el contrario, es un perro cuyos instintos y necesidades han aflorado con el tiempo (como en el caso de los cachorros o adultos adquiridos en una protectora o perrera), nuestro deber como propietarios responsables es adaptarnos y buscar la forma de satisfacerlos física y mentalmente.
Un perro activo y cuya naturaleza genética e individual es respetada, es un perro mucho más feliz y completo.
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