INTRODUCCIÓN

La orina de los animales puede tener muchos colores y, algunos de ellos, aunque asusten no tienen por qué indicar nada malo; diferentes problemas urinarios e incluso en otras localizaciones del organismo, la deshidratación y la toma de medicamentos pueden provocar un cambio en la coloración de la orina de nuestro animal, y algunas de ellas son claras señales de alarma que tienen que hacernos actuar.

¿DE QUÉ ESTÁ COMPUESTA LA ORINA?

En condiciones normales, la orina de los animales se compone principalmente de:

• AGUA: 95%.
• ÚREA: un compuesto químico y una sustancia de desecho que le dice mucho sobre la salud de sus riñones y su correcto funcionamiento.
• NITRÓGENO URÉICO: proviene de la eliminación de las proteínas y está contenido en la urea.
• SODIO: la mayor parte del sodio introducido con los alimentos (alrededor del 90%) se elimina con la orina. Sus valores se miden para evaluar la cantidad de sodio introducida diariamente y el correcto funcionamiento de los riñones.
• SALES MINERALES: calcio, potasio y magnesio.
• ÁCIDO ÚRICO: una sustancia de desecho del metabolismo celular.
  
  

LA ORINA COMO UNA SEÑAL DE LA SALUD DE NUESTRA MASCOTA

El color, el olor, la densidad de la orina y la micción pueden indicarnos si existe algún tipo de problema de salud. Los animales no pueden decirnos la mayoría de veces si algo les molesta a excepción de problemas realmente evidentes que veremos a continuación, así que es importante que no pasemos por alto los siguientes síntomas:

• ORINA DE COLOR MUY OSCURO Y OLOR FUERTE: Esto nos indica que el animal está deshidratado y requiere de beber mucha más agua.
  
  
• ORINA ROJIZA: En los conejos la orina puede ser de color anaranjado si ha consumido alimentos con esta coloración (como las zanahorias) pero la orina de color rojizo también puede indicarnos que hay presencia de sangre. Si vemos esta coloración en la orina de nuestra mascota lo mejor es echar (si se puede) agua oxigenada encima de la orina, si esta burbujea es que sí hay presencia de sangre y debemos ir al veterinario ya que puede indicar la presencia de cristales en la orina, piedras renales, infecciones avanzadas, rotura de los glóbulos rojos o insuficiencias renales.
  
  
• DIFICULTADES PARA ORINAR: Si a nuestra mascota le cuesta orinar podemos estar ante un caso de piedras renales o cristales. 
  
  
• DOLOR AL ORINAR: Igual que en el punto anterior podemos estar ante un caso de piedras renales o cristales, o incluso masas extrañas que pueden dificultar el correcto paso de la orina. 
  
  
• ORINA EXCESIVA: Si nuestra mascota bebe en exceso y orina casi de inmediato, en cantidades muy grandes, podemos estar ante un animal diabético. 
  
  
• ORINA CON MUY MAL OLOR ACOMPAÑADA DE VÓMITOS: Esto nos indica un posible daño hepático.
  
  
• MICCIÓN EN CANTIDAD NORMAL PERO DEMASIADO TRANSPARENTE: Esto puede indicarnos que hay un problema a nivel renal, ya que los riñones no filtran correctamente.

ENFERMEDADES RELACIONADAS CON EL SISTEMA URINARIO

INSUFICIENCIA RENAL: La insuficiencia renal aguda es la pérdida repentina de la función renal, que puede ser causada por un número de factores, incluyendo la disminución de la presión arterial, toxinas tales como anticongelante, obstrucciones uretrales o uretral, y enfermedades , como la leptospirosis y la enfermedad de Lyme . Si se diagnostica a tiempo y se tratan agresivamente, la insuficiencia renal aguda puede ser reversible. La insuficiencia renal crónica es la pérdida a largo plazo de la función renal que no se puede revertir, pero el tratamiento puede ayudar a retardar la progresión de la enfermedad.

PIEDRAS / CÁLCULOS RENALES: Los perros pueden formar cristales de minerales y piedras, en cualquier parte del tracto urinario. Estos cristales y piedras pueden irritar el revestimiento del tracto urinario o bloquear el flujo de orina, la cual es una emergencia médica.

INFECCIONES URINARIAS: Las bacterias pueden ascender a través de la uretra o viajar a través de la sangre e infectar la vejiga urinaria, la próstata (especialmente en perros machos que no han sido castrados), y los riñones.

INCONTINENCIA: Esta condición se presenta con mayor frecuencia en las perras castradas. Las mascotas con esta afección a menudo pierden el control de la vejiga mientras duermen. Los perros con enfermedades o lesiones de la médula espinal también pueden desarrollar incontinencia urinaria.

PIELONEFRITIS: Se trata de una infección de riñón causada por bacterias en la orina que afectan al uréter. Esta enfermedad suele aparecer cuando se ha producido previamente una infección de vejiga y puede presentarse de forma crónica o aguda.

NEFRITIS: La nefritis es una inflamación que está relacionada con enfermedades tales como:

• Erliquiosis.
• Leptospirosis.
• Borreliosis.
• Pielonefritis.
• Hepatitis.
• Pancreatitis

NEFROSIS: Es la degeneración del riñón y puede hacer presencia debido a falta de irrigación sanguínea o una “intoxicación” como, por ejemplo, por el consumo de algunos medicamentos.

HEPATITIS: La hepatitis es la inflamación del hígado. Inflamación es la hinchazón de órganos que ocurren cuando se lesionan o infectan, y puede dañar su hígado. La hinchazón y daño puede afectar el buen funcionamiento de este órgano. La hepatitis puede ser una infección aguda (a corto plazo) o una infección crónica (a largo plazo). Algunos tipos de hepatitis solo causan infecciones agudas. Otros pueden causar infecciones tanto agudas como crónicas.

PANCREATITIS: La pancreatitis es la inflamación del páncreas.​ Ocurre cuando las enzimas pancreáticas, que digieren la comida, se activan en el páncreas en lugar de hacerlo en el intestino delgado. La inflamación puede ser súbita o progresiva.

ENFERMEDAD RENAL CRÓNICA (ERC): La enfermedad renal crónica (ERC) se caracteriza por la pérdida progresiva de la capacidad de los riñones para filtrar la sangre y reabsorber el agua de la orina. Los productos de desecho metabólicos tienden a acumularse en el organismo y, aunque el gato beba más agua de lo habitual, tiende a deshidratarse. La enfermedad renal crónica (ERC) no es reversible, pero las pruebas recientes permiten diagnosticarla más temprano que antes.

ENCEPHALITOZOON CUNÍCULI: Este parásito (que cuenta en nuestro blog con su propio artículo) puede afectar a los riñones y producir incontinencia en los conejos.

CRISTALES EN LA ORINA: Los cristales en la orina son la formación y acumulación de pequeñas masas que están compuestas por como fosfato, calcio y magnesio, por ejemplo, siendo normal presentar muy pequeñas cantidades de estos cristales en la orina, pudiendo ocurrir debido a los hábitos alimenticios, poca ingestión de agua y cambios de temperatura corporal. Algunas razas caninas como el dálmata son propensos a ellos; actualmente hay dos líneas de dálmatas (HUA y LUA) creadas de cara a minimizar estos casos, los dálmata LUA no suelen acumular cristales en la orina.

CÁNCER: Estas neoplasias son poco frecuentes, ya que suponen menos de un 2 % de los tumores que afectan al perro y menos de un 3 % de los que afectan al gato. Su pronóstico es, en general, muy malo debido a la naturaleza invasiva del proceso y a su tendencia a metastatizar rápidamente.

CONCLUSIÓN

Como podemos ver, la orina de nuestra mascota puede indicarnos muchas cosas acerca de su salud, varias de estas patologías son reversibles o solucionables en sus primeros estadios, así que nunca es tarde para reconocer los síntomas de que algo va mal y así acudir al veterinario.