INTRODUCCIÓN

Aunque parezca una tema relativamente sencillo (porque “las ratas comen de todo, ¿no?”) es algo mucho más complejo y, si queremos que nuestra rata viva el máximo tiempo posible, debemos procurar ofrecerle una alimentación cuidada y adaptada tanto a su especie como estilo de vida. 

La rata es un animal omnívoro y, además, es “oportunista”, esto quiere decir que comerá todo lo que encuentre en su camino, sin hacer ascos a nada, y que puede comer tanto productos de origen vegetal como de origen animal. Las ratas salvajes tienen una alimentación muy diferente según donde vivan, por ejemplo, una rata que viva en un ambiente campestre basará su alimentación en grano, vegetales, huevos o insectos, incluso consumirán carroña (restos de animales muertos) sin distinguir si se trata de uno de su misma especie (canibalismo) u otra clase de animal o entrarán en las granjas y, si pueden, matarán y se llevarán (o comerán ahí mismo) las camadas de pocos días de otras especies como conejos o cobayas. 

LA ALIMENTACIÓN DE LA RATA SALVAJE Y LA DOMÉSTICA

Las ratas “de ciudad”, por otro lado, ven en los humanos una gran fuente de alimento que les hace agudizar su ya de por sí altísima inteligencia, ya que se harán paso por cualquier hueco para acceder a las despensas, cocinas o almacenes a través de las alcantarillas o algún hueco en paredes o puertas, pudiendo entrar a través de espacios realmente estrechos. Pero, aunque esto sea algo que nos resulta “desagradable” (ya no solo por el tema de higiene sino también de salud), no es un animal que haya que erradicar de las ciudades, ya que cumplen una función en el subsuelo, y esa es el limpiar las alcantarillas o calles de todos los restos que nosotros dejamos, de no suceder esto lo más probable es que las cañerías se atascarían con mayor facilidad. Una de las causas de que las ratas “callejeras” vivan un periodo de tiempo ta, tan corto (aproximadamente 6 meses) es debido, entre otros factores, a la alimentación que tienen, la cual no les nutre correctamente o causa grandes desgastes en sus cuerpos, al no ser la correcta. Este tipo de ratas se centran en sobrevivir, pero esto no es así en las ratas “mascota” o de “fantasía”, nuestro deber es proporcionarles una nutrición correcta y que les ayude a “vivir”. 

Aunque la rata “salvaje” y la de “fantasía” sean la misma especie las necesidades de ambos tipos de animal son muy distintos; es bastante complicado que una rata de “fantasía” se vea en la tesitura de tener que buscar restos entre grandes montones de basura, o de colarse en un corral para robar huevos o cazar crías. Una alimentación correcta y en la que el propietario se vuelca diariamente es imprescindible para una vida más o menos larga en las ratas, si un día les hacemos “pecar” (restos de pizza, pienso de perro…) y comer algo inadecuado no va a pasar nada, al igual que nosotros podemos estar uno o dos días comiendo comida basura, pero hacerlo de forma constante acorta la vida de cualquier ser vivo, sea cual sea su especie, y siempre se adaptará a la edad y circunstancia de la rata (bebés, hembras embarazadas, ancianas…).   

En el caso de las ratas este acortamiento de vida puede ser de hasta un año y medio, sin importar lo cuidada que sea su línea genética o lo “longevos” que sean sus antepasados.

Uno de los problemas que podemos encontrar en las mixturas que podemos encontrar en el mercado radica en que la rata puede elegir lo que quiere y no quiere comer, lo que puede llevar a un desequilibrio nutricional y a que tengamos que vigilar, diariamente, que se coma todo. Por otro lado tenemos un problema aun más importante, y es que muchas casas de alimentación animal venden este tipo de piensos para que sea destinado a varios tipos de animales: Ratas, ratones, conejos, cobayas… Y esto es un gran error. Una opción es que realicemos nuestra propia mixtura, pero este es un gran compromiso para el que hay que mirar muy bien los ingredientes y necesidades de nuestra rata, si su alimentación no es variada o no contiene alguna de las propiedades que requiere puede terminar con grandes carencias nutricionales (anemia, obesidad, raquitismo.) 

A parte de los piensos que les demos a diario es imprescindible que les ofrezcamos (también cada día) frutas o verduras frescas (veremos cuales un poco más adelante) y, dos o tres veces por semana, una fuente de proteína de origen animal en crudo y siempre fresco (¡no les des nunca comida caducada o podrida!), por ejemplo huevos, pescado o carne. 

NO importa la ideología que tengas tú respecto a tu alimentación o estilo de vida, las ratas (al igual que los perros, gatos o hurones) necesitan una fuente de origen animal en su alimentación para que esta sea correcta. NO puedes obligarlas a tener una alimentación exclusivamente basada en cereales o vegetales, si esta es tu intención, adquiere un animal herbívoro, como un conejo o cobaya.

Respecto a las cantidades que pueden comer nuestras ratas esto es algo que nosotros tenemos que controlar de una forma seria, hay algunas ratas a las que se les puede permitir tener el comedero lleno y no tenemos que preocuparnos ya que ellas mismas se administran la comida y, a diferencia de otras, no poseen ese sentimiento de “gula” que puede provocar una obesidad importante en las ratas; de la misma forma que tenemos que vigilar que no hagan “reservas de comida” por toda la jaula. ¿Qué queremos decir con “reservas de comida”? Algunas ratas tienen tendencia a esconder la comida (bien en el mismo sitio siempre o en diferentes zonas de su hábitat) para poder comerlo después, es un comportamiento normal en ellas pero, también, muy insalubre, ya que la comida (al no ser ingerida se pudrirá con rapidez, saldrán hongos, bacterias…)

En resumen, será un foco de infecciones tanto para nuestras ratas como para nosotros mismos, por eso debemos revisar cada día que no hagan estas cosas. A diferencia de otros comportamientos que son “adiestrables” (como el hacer sus necesidades en un esquinero) va a ser prácticamente imposible el cortar este tipo de cosas, es algo natural y espontáneo en ellas, así que debemos ser respetuosos con nuestras ratas y adaptar nuestra rutina para incluir la revisión de este tipo de “almacenes”. 

Respecto a las golosinas “comerciales”, las ratas no suelen darles más atención de las que dan al pienso; algunos criadores recomiendan, en este sentido, el comprar las “drop” (imagen de abajo a la derecha), se les puede ofrecer tanto de perro/gato (al contener una fuente de origen animal) como las destinadas a los roedores. 

Otra gran golosina que podemos encontrar en el mercado son las piedras de calcio, las cuales son importantes para el limado de los dientes de nuestras ratas (aunque no son aptas para conejos o cobayas). 

Otra golosina muy beneficiosa para el desgaste de los incisivos y muy apta para nuestras ratas son los “huesos de jibia” que se comercializan, principalmente, para las aves. 

Respecto a las “golosinas humanas” (fruta, verdura, queso, carne, galletas, pizza (sin salsa) etc), hay que tener muy en cuenta la cantidad que les damos, ya que esta no debe superar el tamaño de la bola de un alfiler, por otro lado es mejor ofrecérselo cuando estén fuera de la jaula, vengan a nosotros, realicen algo que nos guste (como usar el arenero o aprender un truco), no solo será más satisfactorio para la rata, sino que será también una gran forma de alentarlas confiar en nosotros y aprender muchísimas cosas. 

Debemos tener mucho cuidado con los azúcares y las grasas para evitar la obesidad y las patologías que estas acarrean, así que apostad siempre por golosinas saludables. 

ALIMENTOS APTOS

—Acelga                     

—Albaricoque  

—Alcachofa cocida                             

—Arroz                                    

—Calabacín                                      

—Cereza                          

—Champiñones                               

—Diente de león                                         

—Calabaza                         

—Coco                             

—Endivia                       

—Escarola                                       

—Espárragos                                   

—Espinacas                            

—Guisantes (cocidos)                          

—Fresas                                

—Pera

—Pimiento —Plátano  

—Piña    

—Sandía

—Rúcula

—Tomate

—Trigo 

—Uva

—Zanahoria

—Coliflor

—Garbanzos

—Dátiles

—Huevo  

—Muesli (sin fruta/azúcar)

—Nueces                      

—Achicoria

—Aguacate (maduro sin piel)

—Arándanos

—Ajo (muy, muy poca cantidad)

—Apio

—Algarroba

—Avellanas

—Batata cocida

—Brócoli (poco)

—Bayas de Goji

—Cacahuetes

—Carne a la plancha o cocida

—Castañas

—Chirimoya

—Cilantro

—Judía verde

—Manzana

—Melocotón

—Melón

—Nectarina

—Papaya

—Pasta

—Pepino

—Insectos (pocos)

—Jamón york

—Lechuga

—Lentejas

—Maíz

—Pan casero

—Patata morada/blanca cocida.   

—Remolacha

—Piñones

—Pipas de calabaza

—Pipas de girasol

—Puerro (parte blanca y muy poca cantidad)

—Queso sin sal

—Yogurt natural (sin azúcar)

—Pasas

—Aliso

—Almendra dulce (sin sal/azúcar)

—Avena

—Berenjena (cocida y muy poca cantidad)

—Canónigos

—Cebada

—Cuscús 

—Espelta

—Frambuesas (muy poca cantidad)

—Galletas sin azúcar

—Gusanos (muy pocos)

—Caqui

—Latas para perros o hurones (muy poco)

—Lino

—Litchi

—Anacardo

—Membrillo cocido

—Mijo

—Moras (poca cantidad)

—Olivas (sin sal)

—Orégano (poca cantidad)

—Ortiga blanca (cocinada)

—Pan duro

—Papilla de bebé (sin azúcar ni cebolla)

—Papaya

—Pavía

—Pepino

—Pescado crudo/cocinado (sin salsa ni especias)

—Pistachos

—Quinoa

—Roble (solo para roer, no para comer)

—Tomillo (poco)

—Flor del trébol

—Madera de sauce

—Zanahoria

ALIMENTOS PROHIBIDOS

—Alcachofa cruda                       

—Altramuz (una legumbre)          

—Alcohol                                    

—Alubias secas                                    

—Azúcar                                      

—Batata cruda                                                        

—Col                                         

—Especias                                                           

—Jamón serrano                       

—Kiwi (en machos)                                  

—Limón (en machos)                                 

—Lombarda                             

—Mandarina (en machos)                           

—Mango (en machos)                                

—Marisco cocido

—Plátano verde

—Pimienta negra  

—Regaliz     

—Semillas de frutas

—Soja 

—Cannabis

—Patata morada cruda

—Abedul

—Álamo

—Almendras amargas

—Amapolas

—Arveja

—Bebidas carbonatadas

—Bellotas   

—Laurel

—Paracetamol

—Pomelo (en machos)

—Cacao

—Café

—Cafeína

—Caqui

—Cebolla

—Cebollino

—Granada

—Grosella

—Higo

—Jengibre

—Leche

—Naranja (machos)

—Perejil

—Pomelo

—Sal

—Nuez moscada

—Pan comercial

—Rábano

—Tabaco

—Té

—Teína

—Caramelos

—Alfalfa

—Grasa

—Pienso de gato

—Habas crudas o secas

—Haya

—Hiedra

—Pino

—Ricino

—Ruibarbo

—Lechuga roja

—Tejo negro

—Tofu

EL VÓMITO EN LAS RATAS Y EL D-LIMONENO

Las ratas, físicamente, no pueden vomitar, así que la ingesta de cualquiera de estas cosas, por pequeña que sea la cantidad puede resultar mortal para ellas, algunos de los efectos que estos producen en el organismo no se ven de forma inmediata, sino que tardan varias horas en mostrar sus efectos y, para entonces, es bastante probable que no se pueda hacer nada por nuestra rata. 

Por ejemplo, un compuesto presente en los cítricos (tanto en la pies externa como en la interna), llamada “D-Limoneno” es incompatible con las hormonas de las ratas machos y produce en ellos un efecto mortal. Algunos productos como piensos comerciales o antiparasitarios también pueden tenerlo en su composición, así que es importante el revisar lo que damos a nuestras ratas antes de darles nada. 

Tampoco podemos darles alimentos de tipo “pastoso” si estos no se diluyen previamente, ya que podría producir asfixia.

¿CÓMO ELEGIR UN BUEN PIENSO?

Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que, en las composiciones de los piensos, el primer ingrediente será el más abundante de todos, así mismo tiene que poner el porcentaje de cada ingrediente y ser detallado, no vale poner “cereales X%” que “avena X%”, “lino X%”… Tampoco es recomendable comprar uno en el que ponga “frutas” en general (sin especificar), por el tema del “D-Limoneno” que es mortal para los machos. Cuando no se especifica suelen ser restos de esos alimentos que, quizás, no aporten todo lo que tienen que aportar en una nutrición equilibrada. Una gran opción es el pienso natural para ratas de Reis d'Aranda.

Un pienso alto en proteínas y lípidos (grasas) es excelente para bebés, lactantes, ratas convalecientes (que se están recuperando de algún proceso médico)… Pero es nefasto en adultos, ya que un exceso de proteínas puede llevar a un fallo renal y, un exceso de grasas, a la obesidad.