¿QUÉ ES EL "ABANDONO DOMÉSTICO"?

Cuando se habla de abandono en los mítines políticos, discursos de asociaciones proteccionistas o medios de comunicación, nunca escuchamos el término "abandono doméstico"; y no, no es un nombre que nos hayamos inventado nosotros, sino que su presencia tan tan silenciosa como está "bien vista" por más de un propietario. 

El "abandono doméstico" es, precisamente, ignorar a sabiendas que nuestro animal tiene una dolencia, patología o necesidades (físicas o psicológicas) cuando estas tienen solución. 

TIPOS DE "ABANDONOS DOMÉSTICOS"

• MANTAS DE NUDOS: Cuando adquirimos un animal de pelo largo o de doble capa (como el spitz alemán, el conejo teddy o el gato persa), es nuestra obligación el atender correctamente el mantenimiento de su pelo, el cual debemos cepillar cada día para evitar que se enrede p acumule lana de la muda, lo que con el tiempo termina produciendo grandes capas de nudos que finalizan uniéndose entre sí, haciendo lo que llamamos "mantas de nudos". 
  Este tipo de "abandono doméstico" es demasiado habitual en las peluquerías de mascotas, sobre todo debido a que los propietarios no quieren gastarse el dinero en llevar a su mascota todos los meses; sino que acuden cada tres, seis e incluso doce meses para que el profesional "arregle" el desastre que ha hecho, porque en todo ese tiempo tampoco lo han cepillado. 
  Las mantas de nudos son sumamente peligrosas, ya que evitan la oxigenación de la piel y, en los peores casos, la circulación de la sangre en zonas más sensibles, como la cola, las muñecas, los tobillos y las orejas. 
  
  
  
  (Arriba: Manta de nudos en un perro)
  
  CONSECUENCIAS DE LAS MANTAS DE NUDOS:
  
  -Picores
  
  -Irritaciones
  
  -Dermatitis (seca o seborreica)
  
  -Necrosis en zonas sensibles (cola, orejas, muñecas y tobillos)
  
  -Hongos (si el dueño lo lava y no se puede secar bien)
  
  
  
  
• ACUMULACIÓN EXCESIVA DE SARRO:
  
  La acumulación de sarro es muy frecuente en las razas de perros pequeñas y medianas, pudiendo darse de igual forma (aunque menos frecuente) en los perros grandes y, además, tampoco es extraño verlos en los gatos (aunque de forma igualmente poco frecuente). 
  La acumulación de sarro se da por una cuestión multifactorial (tiene diferentes causas), entre las que destacan:
  
  -Genética de ese animal en concreto
  
  -Alimentación excesivamente blanda (abuso de latas o patés)
  
  -Falta de juguetes o snacks para masticar
  
  -Falta de limpieza en las razas pequeñas por parte de los dueños
  
  -Edad 
  
  -Dientes demasiado pequeños y juntos (apiñados)
  
  
  (ARRIBA: Boca de un perro infectada por el sarro, en un grado muy avanzado)
  
  Esta patología (porque es una enfermedad) es bastante frecuente y más de un propietario la ignora porque no quiere meter al perro en quirófano para que se le realice la limpieza, no quiere que se le quiten piezas dentales o, directamente, no quiere gastarse el dinero. 
  La acumulación excesiva de sarro no es solo antiestética y huele horrible (en los peores casos, la casa entera puede oler fatal debido al jadeo del perro), sino que es muy peligrosa para la salud tanto del propio perro como de su familia. 
  Esto parece una exageración, ¿verdad? Pues no es así. La acumulación de sarro daña muchísimo las encías y las raices de los dientes, produciendo dolor, problemas para masticar y abscesos de mayor o menor gravedad, cuando el perro traga se está tragando sus propias bacterias y estas pasan al torrente sanguíneo, por lo que las posibilidades de sufrir problemas de corazón o neurológicos debido a esas mismas bacterias se dispara; debido al dolor, muchos animales dejan de comer y, además, cada vez que nos chupa y nosotros nos tocamos un ojo sin darnos cuenta o comemos algo de seguido sin lavarnos las manos, nos estamos tragando esas mismas bacterias. 
  
  La única excusa para no solucionar este problema, es que se trate de un animal de edad extremadamente avanzada, que sufra de problemas en el hígado o los riñones o sea hipersensible a las anestesias / sedaciones.
  
  
  
• ENFERMEDADES A CAUSA DE UNA HIGIENE POBRE:
  
  Todos somos conscientes de que vivir entre la suciedad trae enfermedades, entonces, ¿por qué algunas personas permiten que sus animales vivan en zonas sucias?
  En este caso, el vivir en un ambiente asqueroso, lleno de sustrato sucio, orines y heces es más habitual en las pequeñas mascotas que en las grandes. Da igual si el criador le da dicho paso por paso como mantener a su mascota correctamente, si le ha entregado un dossier que el mismo propietario ha firmado (dejando constancia de que lo ha leído y, por ende, sabe lo mínimo que tiene que hacer), da igual si el peluquero de su conejo o cobaya se lo explica o si el veterinario el da un toque de atención; hay gente que no aprende y que, le encanta tener a su animal en casa pero limpiar se le hace tedioso, aburrido o le da asco. 
  Yo me pregunto, ¿para qué tienes a tu mascota entonces? 
  No importa si tu conejo o cobaya vive en un parque o jaula de grandes dimensiones, si no limpias va a terminar desarrollando enfermedades específicas de la suciedad como la dermatitis o la miasis (infección por larvas de mosca)
  
  
• PODODERMATITIS POR HUMEDAD:
  
  La pododermatitis es una de las enfermedades más frecuentes en conejos y cobayas, es multifactorial (tiene varias causas) pero, en este caso, vamos a centrarnos en la pododermatitis causada por la humedad. 
  Cuando tu conejo o cobaya vive en una jaula o parque muy, muy sucio, el suelo que pisa (mantas, sustratos...) está constantemente húmedo por la orina, la orina es muy ácida y cuando una zona del cuerpo está en contacto constante con la orina, no se limpia ni se seca, el pelo del animal se termina quemando, se cae, la piel se irrita... 
  
  
  (ARRIBA: Pododermatitis por humedad en un conejo adulto)
  
  En la pododermatitis, este mal se centra en las palmas de las manos y de los pies, produciendo unas úlceras muy dolorosas que deben tratarse lo antes posible; de lo contrario, si no las tratamos, estas úlceras llegan hasta los huesos y pueden producir necrosis e infecciones óseas. 
  La pododermatitis leve (una ligera calva en los talones o dedos) se puede tratar en casa con algo de asesoramiento, pero en los casos moderados y graves (como la foto que podemos ver, donde el animal está empapado de orina) es urgente ir al veterinario, aplicar todos los tratamientos oportunos, poner "zapatas" al animal para proteger la zona y, en los peores casos, ir al quirófano. 
  
  
• MALOCLUSIÓN NO TRATADA:
  
  Ya hemos hablado antes de la maloclusión, lo grave que es y que, debido al rápido crecimiento de los dientes en animales pequeños, puede irse de las manos en cualquier momento pero, cuando sabemos que nuestra mascota sufre de esta malformación (de nacimiento o adquirida por cualquier causa) es importante llevar un seguimiento estricto de la misma en el veterinario u, optar por la solución más cómoda y rápida: extirpar los dientes. 
  El problema viene cuando el propietario no quiere solucionar el problema o no quiere gastarse el dinero, incluso cuando lleva un seguimiento pero este no es estricto: los dientes crecen y se deforman hasta lo impensable. 
  En esta foto, vemos unos incisivos de conejo adulto con maloclusión genética, de primeras no parece tan grave, pero los incisivos superiores están girados hacia atrás formando un anillo que se clava en el paladar.
  
  
  
  Cuando la maloclusión no se trata, los dientes se deforman produciendo dolor, fracturas en la mandíbula, úlceras, perforaciones (labio, mejilla, paladar o lengua), inanición (el animal no come por el dolor) y muerte. 
  
  
  
• OBESIDAD Y SOBREPESO: 
  
  Aunque algunas personas se empeñen en convencer a la gente que la obesidad y el sobrepeso es algo bueno y de lo que uno mismo debe estar orgulloso, tenemos que ser realistas: NO. La obesidad y el sobrepeso no son buenas y en nuestros animales muchísimo menos. 
  Es muy común que las mascotas (en especial, los perros y los gatos) sufran de obesidad y sobrepeso, a veces hasta el extremo más aberrante y, aunque sus dueños lo saben, les hace gracia o les da igual; no hacen nada para remediarlo. 
  Nuestras mascotas no pueden saber cuando están demasiado gordos o cuando han comido demasiado, sino que se comen todo lo que nosotros les ofrecemos. 
  El sobrepeso y la obesidad, conlleva los siguientes peligros:
  
  -Problemas cardíacos
  
  -Problemas respiratorios
  
  -Problemas cerebrovasculares
  
  -Diabetes
  
  -Problemas articulares
  
  -Dolor
  
  -Infecciones en los pliegues de piel
  
  -Úlceras (por el roce de los pliegues)
  
  -Muerte
  
  -Complicaciones en quirófano o con la anestesia
  
  -Cáncer
  
  
  Si nuestra mascota está obesa y nosotros permitimos que lo esté, no haciendo nada para corregirlo, estamos siendo súmamente negligentes. 
  Estamos matando a nuestro animal poco a poco. 

CONCLUSIÓN

Como podemos ver, para abandonar o maltratar a un animal no tenemos que echarlo a la calle, no darle de comer o pegarle, sino que algunas de las acciones que vivimos en el día a día son muestras de ello.
En este artículo, no nos hemos centrado en conceptos "tontos" de lo que es el maltrato, sino que como profesionales hemos hablado en base a nuestras experiencias diarias.