INTRODUCCIÓN

Lo primero que tenemos que tener claro es que el conejo no es en absoluto un animal agresivo, no es un depredador, es una presa y, por lo tanto, en su ADN está el huir antes que el atacar, generando una naturaleza más nerviosa y asustadiza que otros animales como los perros y los gatos (que sí son depredadores). 

La socialización precoz y una buena selección genética (padres sociales y agradables tendrán hijos sociables y agradables) es una de las grandes ayudas a que nuestro conejo sea un compañero grato, pero en ocasiones podemos encontrarnos con que a comenzado a mordernos, lo que puede signo de que algo más sucede.

¿POR QUÉ MI CONEJO ME MUERDE?

¿Cómo podemos actuar? Lo más importante es saber el origen del problema. Las principales causas de que un conejo se muestre agresivo son:

PROBLEMAS HORMONALES: Si tu conejo no está castrado es probable que su comportamiento se vuelva más agresivo y territorial (en especial, cuando están más necesitados o receptivos). Esta situación ocurre con más frecuencia en las hembras que en los machos y se soluciona castrándolo a la edad apropiada (5 meses de edad), si nuestro conejo no va destinado a ser un animal de cría o exposición lo mejor que podemos hacer es castrarlo para evitar este comportamiento. 

MIEDO: Son animales de presa como ya hemos comentado y, cuando un animal está en una situación de peligro se encuentra con dos posibles salidas: huir o atacar (ya sabéis el dicho de "la mejor defensa es un buen ataque"). Tienen una vista excepcional (más limitada en los conejos de orejas caídas) a excepción del punto frente a su nariz que es totalmente ciego, si le acariciamos o tocamos sin que nos vea correctamente puede asustarse y reaccionar de mala manera sin querer, así que es recomendable hablarles con voz suave antes de hacerlo, así sabrán que estamos ahí. 

DOLOR: Los conejos no expresan su dolor la mayoría de veces para no verse como "presas fáciles"; pero al igual que todos los animales pueden comportarse de forma agresiva ante un dolor intenso.

ESTRÉS: Algunos conejos tienden a estresarse con más facilidad y la agresión es una forma de liberar ese mismo estrés. En estos casos la mayoría del estrés es liberado contra uno mismo (comportamiento autodestructivo), por ejemplo arrancándose el pelo o mordiéndose las patas.

QUIERE DECIRTE ALGO: Los conejos son incapaces de mover las cosas con las patas así que utilizan la boca para ello, lo que puede producirnos pequeños mordiscos accidentales (si herida, solo un pellizco) y arañazos en los objetos. 

TERRITORIALIDAD: Cuando hemos estado con otros conejos es recomendable lavarnos las manos antes de manipular a nuestros propios animales, ya no solo por higiene (ya que podemos ser vectores de enfermedades específicas) sino porque estaremos impregnados del olor de ese conejo "extraño" y puede llegar a confundirse, atacándonos al pensar que somos un intruso. 

¿EL MORDISCO DEL CONEJO ES PELIGROSO?

El mordisco del conejo es doloroso como lo puede ser el mordisco de cualquier ser vivo, la gravedad del mordisco dependerá de la fuerza ejercida y del tamaño del animal (no es lo mismo el mordisco de un Netherland Dwarf que de un Gigante de Flandes), si nuestro conejo nos muerde tenemos que tener claro que no nos va a transmitir ninguna enfermedad, lo único que tenemos que hacer es desinfectar la herida y taparla en el caso de que se haya producido un pequeño sangrado. 

CONCLUSIÓN

Que nuestro conejos nos muerda no es en absoluto agradable pero tiene solución en el 99% de las veces, es importante que como propietarios responsables tratemos de encontrar el origen del problema y le pongamos una solución