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EL CONEJO GIGANTE ESPAÑOL
INTRODUCCIÓN
Cuidar el patrimonio natural, conservarlo y darlo a conocer es lo que une a los criadores de conejo gigante de España. Esta raza autóctona en peligro de extinción es como su nombre indica de gran tamaño.
EL ORIGEN DEL CONEJO GIGANTE ESPAÑOL
La raza de conejos Gigante Español fue creada en Valencia a principios del siglo XX. Los cunicultores que intervinieron en su formación quisieron conjuntar en ella la rusticidad y las buenas características reproductivas y maternales de los conejos españoles con las cualidades de crecimiento y gran formato de algunas razas extranjeras. Para su creación cruzaron hembras de la raza Pardo Común Español con machos de la raza Gigante de Flandes, obteniendo finalmente la raza de conejos de Gigante de España.
La nueva raza nace como respuesta a las necesidades de mejora en el crecimiento de la cunicultura desarrollada en corrales y primitivas jaulas. La raza alcanza una fuerte difusión antes de la Guerra Civil aunque ya en la década de los 70 como consecuencia de la importación de razas y líneas de conejos más competitivas, el censo de Gigante de España descendió drásticamente. El gran impulsor y divulgador del conejo Gigante de España fue Ramón Crespo, quien incorpora importantes fotografías y testimonios en su libro ‘Conejos y conejares’ (Madrid, 1925). Los cruces y selección fueron desarrollados por cunicultores de la época como Burgal, Baggetto y Lacomba. Esta raza fue imperante en el tipo de cunicultura familiar que tuvo lugar durante las décadas 50 y 60.
Al finalizar la década del ochenta, el gigante español sufrió un duro golpe, del que mucho le ha costado reponerse. Anteriormente, ya había experimentado el azote de las epidemias, algunas de ellas ocasionadas de manera intencional, lo que sumado a la introducción de nuevas razas como la californiana o el neozelandés, mermaron su población alarmantemente.
Este hecho anterior también repercutió negativamente en otras especies como el lince y el águila imperial, quienes tenían en el conejo una fuente básica de alimento. No obstante, el esfuerzo de varios entusiastas valencianos por conservar la raza, y las nuevas medidas ambientales impuestas por el gobierno de dicha región, han frenado la extinción total de uno de los símbolos más representativos de nuestro país.
El conejo gigante de España obtuvo su inclusión en el Catálogo Oficial de Razas de Ganado de España, como raza autóctona en peligro de extinción, en 2016. Los trabajos para evitar la extinción de la especie empezaron en 1984 cuando la profesora Marina López, de la Facultad de Veterinaria de Zaragoza, comenzó a recuperar en el campo ejemplares de este gran conejo español, atesorando un centro de cría en el propio departamento de Zootecnia con más de 200 hembras en pureza de raza.
Hoy podemos decir el futuro de esta raza autóctona en peligro de extinción está en manos de criadores que los cuidan por amor.
ESTÁNDAR DEL CONEJO GIGANTE ESPAÑOL
TIPO: Raza hipermétrica, convexa y longilínea. Es un animal voluminoso (85-95cm de longitud), macizo y redondeado.
CABEZA: Gruesa, acarnerada, con la frente roma y la bóveda del cráneo con marcada curvatura.
HOCICO: Romo y corto, posee largos bigotes.
OJOS: Grandes, de color pardo (más o menos oscuro), sin matiz de negro (variedad leonada).
OREJAS: Grandes, anchas, carnosas, terminadas en punta de cuchara, son llevadas muy rectas y nunca juntas.
CUELLO: Corto y grueso. En las hembras se presenta un pliegue de piel en forma de papada.
CUERPO: Macizo, sin angulaciones ni salientes.
PATAS: Recias, cortas y anchas. Las posteriores están dotadas de de una fuerza considerable, como lo demuestran especialmente los machos, al golpear el suelo ante cualquier sobresalto o sensación de extrañeza.
UÑAS: Pardas o negras, brillantes y de espesor regular.
COLA: Bastante desarrollada, gruesa y muy pegada al cuerpo.
COLORES: Pardo-leonado, sin manchas blancas, grises o negras. El tono es uniforme a excepción del vientre y parte inferior de la cola, que suele ser más claro, tirando a blanco. El color rubio sucio (algo azafranado) denota falta de selección y degeneración de color en los reproductores.
El color gris también es admitido, mientras que el blanco se ha descalificado, no se cría ni se admite como perteneciente a la raza.
PELO: Corto, sedoso y fino en los flancos.
PESO: 5-7kg en la edad adulta (+11 meses). Con 6 meses deben tener un peso mínimo de 3,5kg.
LA SALUD DEL CONEJO GIGANTE ESPAÑOL
El Gigante Español tiene una esperanza de vida aproximada de entre 5 y 7 años, es una raza fuerte y saludable pero debido a su peso es frecuente que puedan sufrir de pododermatitis.
¿CÓMO ES EL GIGANTE ESPAÑOL COMO MASCOTA?
El Gigante Español es una raza tranquila (mucho más que el Gigante de Flandes) pero debido a su fuerza es imprescindible socializarlo y acostumbrarle a ser manejado, de lo contrario es un animal que puede patearnos o mordernos con fuerza, lo que puede ser peligroso al ser un animal grande y fuerte.
CONCLUSIÓN
Su desarrollo e implantación en los años cincuenta obtuvo el favor oficial y su expansión tuvo carácter nacional en múltiples provincias. En los años setenta su censo y población se redujeron. En la actualidad su cría en pureza se ve reducida a núcleos esparcidos por la Península, en Barcelona, Huesca, Burgos, Zaragoza, Málaga, y Guadalajara, estimando una población de 1.500 ejemplares entre machos y hembras.
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